Un malhechor mexicano se había especializado en cruzar el río grande de vez en cuando y asaltar bancos en Texas. Posteriormente, se ofreció una recompensa por su captura, y un Texas Ranger emprendedor decidió buscarlo. Después de una búsqueda larga, rastreó al malhechor hasta una cantina. Lo halla, se para cautelosamente detrás del malhechor, apunta su revolver a la cabeza del malhechor, y dice:

- Usted está bajo arresto. Indíqueme donde ocultó el botín o le vuelo la tapa de los sesos.

Pero el malhechor no hablaba inglés, y el Texas Ranger no hablaba castellano. Dichosamente, un abogado bilingüe estaba en la taberna y tradujo el mensaje del Ranger. El aterrado malhechor le contesta que el botín estaba sepultado bajo el árbol de roble detrás de la cantina.

- ¿Qué dijo? -le preguntó el Ranger.
- El abogado contestó:
- Dijo, 'no me jodas, gringo. No te atreverías a dispararme'.

Copyright 2010 DE TODO UN POCO 1
Lunax Free Premium Blogger™ template by Introblogger